Emite
para mí
tu
radiación
en onda...
corta,
íntima.
Tan personalizada
que precises
estar
encima
de mí,
a mi costado
debajo de mí,
envolviéndome...
Irrádiame
en frecuencias
de amor,
de deseo,
de caricia,
de ternura,
de dulzura
y de entrega.
Envuélveme
en tus herzios
de pasión,
en tus abrazos
y
tus
suaves
pulsos
digitales.
Báñame
en bequerelios,
curios,
roetgenios,
rutherfordios,
grays,
radios,
remios
y
sievertios
de ti.
Te quiero
toda.
Invádeme
y toma
posesión
de mí.
Sé
mi terapia,
mi tratamiento,
mi curación.
Y si no lo
logramos,
a tiempo,
sé mi mortaja,
mi sudario,
y mi resurrección.
Mi motivo
para
renacer.
Dame vida,
¡Dame
tu
vida,
amor!
¡Dame
tu
amor,
vida!
Gerttz